En 2023, el precio de la vivienda en España experimentó un crecimiento más moderado en comparación con el año anterior. Según el Índice de Precios de Vivienda (IPV) del Instituto Nacional de Estadística (INE), el incremento promedio a nivel nacional fue del 4%, casi la mitad del 7,4% registrado en 2022.
Este ritmo de aumento más pausado se reflejó en el cuarto trimestre de 2023, donde el precio de la vivienda libre bajó tres décimas con respecto al trimestre anterior, situándose en el 4,2%. Sin embargo, los primeros tres cuartos del año mostraron una tendencia ascendente constante, comenzando con un 3,5% en el primer trimestre, aumentando a 4,6% en el segundo y alcanzando un 4,5% en el tercero.
Vivienda nueva vs. segunda mano Al analizar los precios por tipo de vivienda, se observan diferencias significativas. La vivienda nueva experimentó un encarecimiento promedio del 8% durante 2023, aunque en el cuarto trimestre, su tasa anual disminuyó 3,5 puntos hasta el 7,5%.
Por otro lado, la vivienda de segunda mano tuvo un aumento de precios más moderado, del 3,2% en el año. En el último trimestre de 2023, la variación se situó en el 3,6%, cuatro décimas por encima del trimestre anterior.
Variaciones regionales Los precios de la vivienda presentaron tasas anuales positivas en todas las comunidades autónomas, pero con diferencias notables. Las mayores subidas se registraron en Navarra (5,9%), Ceuta (5,5%), Melilla y Canarias (5,3% ambas), Cantabria (5,1%), Andalucía (5%) y Baleares (4,1%), superando la media nacional.
En contraste, las menores alzas se dieron en Extremadura (1,5%), Castilla-La Mancha (1,7%) y Murcia (2,3%).
Durante el cuarto trimestre, las comunidades con mayores incrementos fueron Andalucía (5,3%), Navarra (4,7%), Canarias y Madrid (4,5% ambas). Por el contrario, los menores aumentos se observaron en Castilla-La Mancha (2,1%), Extremadura (2,2%) y Galicia (3,4%).
Perspectivas futuras A pesar de la desaceleración en el aumento de precios de vivienda durante 2023, los expertos prevén que la tendencia alcista se mantendrá en 2024, aunque a un ritmo más moderado. Factores como la escasez de oferta, la demanda reprimida y los costos de construcción en aumento seguirán ejerciendo presión al alza sobre los precios.
No obstante, se espera que las condiciones de financiamiento más estrictas y las tasas de interés más altas, junto con un entorno económico incierto, moderen el crecimiento de los precios en comparación con años anteriores.
En resumen, el mercado inmobiliario español experimentó un aumento de precios más contenido en 2023, con variaciones significativas entre regiones y tipos de vivienda. A medida que avance 2024, los compradores y vendedores deberán mantenerse atentos a los factores económicos y de oferta y demanda que moldearán las tendencias de precios en sus respectivos mercados locales.