En el mundo inmobiliario, la percepción sobre la rentabilidad de la vivienda como inversión sigue en alza, con un aumento significativo del 12% en el último año. Según un estudio reciente, el 70% de los inversores considera que la inversión en vivienda ofrece oportunidades a largo plazo, lo que refleja una tendencia sólida y consistente en el mercado.
Entre las razones más citadas para optar por la inversión en vivienda se encuentran la posibilidad de generar patrimonio (55%) y la seguridad a futuro que ofrece (42%). Es interesante observar que, aunque ambos motivos ocupaban la segunda posición hace un año, el énfasis en la creación de patrimonio ha aumentado en siete puntos porcentuales, mientras que la seguridad futura ha experimentado una ligera disminución de seis puntos. Estos argumentos, aunque fluctúan estacionalmente, se mantienen como pilares fundamentales para los inversores inmobiliarios a lo largo del tiempo.
Por ejemplo, en 2021, hubo un notable aumento en la percepción de la inversión a largo plazo: en febrero de 2020, antes de la pandemia, el 66% de los encuestados mencionaba este aspecto, cifra que aumentó al 73% en febrero de 2021 y se mantuvo en un 67% en 2022. Actualmente, este porcentaje se sitúa en un 70%, mostrando una estabilidad en la preferencia por inversiones a largo plazo.
Los inversores continúan viendo el sector inmobiliario como una opción atractiva para obtener rentabilidad, especialmente a través del mercado de alquiler a largo plazo. Además, la creciente percepción de la rentabilidad del alquiler refuerza esta tendencia, ya que los inversores confían en el aumento continuo de los precios en este segmento.
Sin embargo, es importante destacar que las motivaciones varían según el tipo de comprador. Mientras que el 70% de los inversores ven la inversión en vivienda como una opción a largo plazo, solo el 34% de los compradores de primera vivienda comparten esta opinión. Del mismo modo, la creación de patrimonio es un factor menos relevante para los compradores no inversores, con solo el 20% mencionándolo, en comparación con el 55% de los inversores.
Además de la búsqueda de rentabilidad, otros factores personales o relacionados con el momento también influyen en la decisión de invertir en vivienda. Destaca la percepción de que la inversión en vivienda ofrece una rentabilidad que otros productos financieros no proporcionan, con un impresionante 86% de los inversores respaldando esta afirmación, lo que representa un aumento del 12% respecto al año anterior.
En resumen, la inversión en vivienda sigue siendo atractiva para muchos inversores, especialmente debido a su potencial para generar patrimonio a largo plazo y ofrecer una rentabilidad sólida en un mercado cambiante. Con una demanda sostenida y una perspectiva favorable, el sector inmobiliario continúa siendo una opción destacada para aquellos que buscan maximizar su inversión a lo largo del tiempo.